En el marco de una causa por estafas, el juez federal Daniel Herrera Piedrabuena confirmó el secuestro de aproximadamente 100 mil dólares falsos en la casa de la madre de uno de los acusados en La Rioja. Según el magistrado, los billetes eran de “muy buena calidad” y podían engañar a quienes no conocen los detalles de seguridad de la moneda; no se trataba de simples fotocopias. El dinero quedó resguardado para pericias específicas.
La investigación y los allanamientos
La causa se inició a partir de denuncias de víctimas que alertaron a la Policía Federal sobre maniobras fraudulentas. Con aval judicial, se realizaron operativos simultáneos en La Rioja y en un edificio de Puerto Madero (CABA), donde residían dos de los imputados. En los allanamientos se secuestró documentación y otros elementos vinculados a la investigación. Según medios nacionales, la banda simulaba ser personal del Ministerio de Desarrollo Social y llevaba un estilo de vida elevado, lo que permitió reconstruir la ruta de las estafas.
Modus operandi
El grupo utilizaba un esquema de phishing: mediante llamados y mensajes recolectaban datos personales (fotos de DNI, información sensible) para solicitar créditos o realizar gestiones a nombre de terceros. Se presentaban como representantes del Ministerio de Desarrollo Social y ofrecían falsas ayudas económicas para ganar confianza.
Hasta el momento, cinco o seis personas denunciaron haber sido estafadas. El monto total del perjuicio está en evaluación, y la aparición de dólares falsos abrió una derivación por posibles delitos de falsificación de moneda y lavado de activos.
Próximos pasos
La causa continúa con pericias sobre el dinero secuestrado, análisis de dispositivos electrónicos, testimoniales y pedidos de informes a entidades financieras. No se descartan nuevas medidas ni ampliaciones de imputaciones a medida que avance la investigación.